lunes, 15 de junio de 2015

• A la verita tuya. #sobrinitisaguda

                                         Para Atilio,
por llegar con un puñado de estrellas bajo el agua.

¡Feliz 1º cumplemes!





Desde aquel viernes
cuento los días para susurrarte
que siempre estaré 
a un verso a la redonda
a un beso de distancia
que seré viento que sople la vela
cuando tu velero parezca haberse detenido
oreja sin ánimo de juicio
cuando quieras desenredar algún nudo de tu garganta
brújula que señale tu última sonrisa
cuando creas haberla extraviado
luna llena temblando sobre el mar
cuando tu cielo amague con pesar como oscuridad
canción cargada de armonía
cuando necesites musicalizar algún insomnio
abrazo y chubasquero
cuando quieras cerrar los ojos y llover
cartita en cada cumpleaños
para envolverte en palabras la alegría que supuso tu nacimiento
para que nunca lo olvides
carnaval del interior
cuando tengas ganas de ser chinito que baile en las calles llenas de colores 
valiente
cuando tu cabeza te presente monstruos como Inseguridad o Fobias 
canción de cuna 
cuando te pesen las responsabilidades las decisiones y
quieras volver a sentirte niño que tiene dónde acurrucarse
playa 
cuando desees que el mar se lleve alguna angustia
acerque alguna ausencia
beso
para cuando necesites comprobar que siempre estaré a la verita tuya
                                                     y siempre será todavía









miércoles, 10 de junio de 2015

• QUÉDATE con.


Pinterest.
Ahora que ser romántico es enviar un mensaje rápido, quizá hasta completado por el auto corrector del móvil, rematado con una cara ridícula con corazones en los ojos o lanzando un corazón, me parece oportuno recordarte que hubo un tiempo en que el romanticismo era otra cosa.Y no me refiero a la época literaria, sino a una idea más a pie de calle.Quitemos el foco del plató de Mujeres y Hombres y Viceversa y situémoslo en el auge que está viviendo la poesía en la actualidad. Seguro que has leído en algún muro o tuit un poema de Marwan o de Elvira Sastre. ¿A que sí? Y ahora dime que prefieres a un tío que te escriba kari no me olbides y te adjunte una canción de reggaeton a alguien que te recite cualquier poema de Todos mis futuros son contigo o La triste historia de tu cuerpo sobre el mío.

Casi siempre es tarde cuando comprendes
que era a ti a quien deberías quererte.
Y sin embargo, siempre que lo haces
ese amor llega justo a tiempo.
Marwan

Mírate al espejo y dime si no has querido ser la chica de lluvia de TuristaEnTuPelo.De eso, precisamente, quería hablarte.Del chico que te dedique algo más que un montón de corazones en alguna red social o App de mensajería instantánea.


Quiero una chica hecha de lluvia.
Una chica que me moje, que me haga ver el arcoiris en los días sin nubes.
Para bailar bajo ella.Para empaparme, que sea capaz de calarme hasta los huesos,
que me deje tiritando y pensando qué ha pasado.Que sea sorprendentemente incontrolable.
Que refresque en las noches calurosas.Que sea un torrente de emociones.Que cree vida a mi alrededor.
Pero también cuidado.La lluvia es delicada.Dicen que jugar con fuego es arriesgado, pero eso sólo es
para los que nunca han jugado con agua.Jugar con agua es impredecible (...)

Carlos Miguel Cortés.@TuristaEnTuPelo

Elige al que sepa qué libro regalarte.No hace falta que compartáis libro de cabecera.No seamos tiquismiquis.Pero si encuentras al chico que haya subrayado la misma frase que tú, en ese libro que una vez te voló la cabeza, no lo pienses, ¡dale una oportunidad! Quédate con el que haya aprendido a abrazar leyendo a Escandar Algeet.El que te susurre el capítulo 7 de Rayuela cuando quiera conquistar tu sonrisa, porque sabrá de sobra cómo hacerlo.El que haya leído La Chica de los Planetas y se haya sentido cómplice. Elige al que se tumbe a tu lado para leer contigo.Al que no le importe que cambies de ídolos literarios como de estados de ánimo.El que conozca cómo sacude Karmelo C.Iribarren y lo comparta contigo en el momento que más lo necesitéis. El que sepa que los domingos, de lluvia o de primavera, son ideales para acurrucarse el uno junto al otro y leer.El que tenga claro que las canciones de Sabina se leen y sus poemas se escuchan.El que si le das a elegir una obra de García Márquez no se decante por Cien años de soledad, sino por El coronel no tiene quien le escriba. El que te acompañe a un recital y no se quede absorto mirando la pantalla del móvil, siguiendo la jornada de liga como si no hubiera vida más allá del fútbol.El que sepa dónde está la sección de poesía de La Casa del Libro y que la Fnac tiene algo más que dvd's, consolas y videojuegos.El que haya sentido un nudo en la garganta al leer los Dios mío.Dios mío con los que Benedetti anunciaba la muerte de la señorita Avellaneda y se le haya estrujado el corazón al leer el día 3 de febrero.

La Tregua. Mario Benedetti
El que cuando dudes de todo, incluso de él, de ti, te lea De qué hablamos cuando hablamos de amor y haga que te emociones pensando que si estuvieras ingresada en estado grave y él en la cama de al lado, totalmente vendado por las heridas del accidente, estaría sufriendo porque el vendaje le impediría girarse para poder mirarte. El que cuando algo te dé miedo, cite a Salem y te convenza con su si vamos a caer que sea volando .El que haya descubierto que, como auguró Marcus Versus, hay un mar bajo el suelo. El que sepa que los libros que se regalan siempresiempre se dedican.Elige al que no crea que sentarse a escribir una carta/un poema/una servilleta garabateada/una canción/una frase es perder el tiempo o una cursilería.Quédate con el chico al que le guste leer - si encima es poesía, te casas- y leer contigo, porque cuando el mundo se haya ido un poco más a la mierda, siempre tendrá un universo de bolsillo con el que sorprenderte, y os miraréis a los ojos y sabréis que Escandar tenía razón y dejaréis que la poesía pague los destrozos.


Pero, cuando te abrazo una noche tras otra
y me encuentro tu pulso a oscuras en cualquiera
de los puntos que laten en tu cuerpo dormido,
cruza por mi cerebro la palabra milagro
Juan Antonio González Iglesias

Quédate con el que pierda un minuto de su tiempo en buscar en qué caseta firma tu autor favorito y te lleve, porque, desde ese día, ese libro será un poquito más especial para ti que para el resto de lectores, y ese recuerdo, como los poemas, será inconcluso.Y como todo lo inacabado... para siempre.
Y si todo va mal y el parasiempre acaba en discusión-portazo-y cruzo la acera si te veo para no saludarte- entonces, siempre podrás descubrir algún poeta nuevo y hacerle hueco en tu estantería.

No eras conveniente y nunca fue oportuno...
.... y sin embargo a veces fue tan bonito
Juan José Tellez